Los mejores 8 restaurantes asadores de Ciudad Vieja

La parrillada mixta es una experiencia irresistible: variedad de carnes jugosas, perfectamente sazonadas y servidas en porciones generosas ideales para compartir. Aunque el muslo de pollo estaba algo cocido de más, el resto de la selección compensó con su sabor y textura que seducen el paladar.



El ambiente animado de un viernes por la noche solo sumó encanto a la visita. La cantidad servida resulta abundante para dos comensales hambrientos, y la relación calidad-precio convierte cada visita en una apuesta segura para quienes buscan disfrutar el auténtico sabor de la carne.

Déjate sorprender por la calidez de este restaurante a pocos pasos de la Plaza Mayor, donde el trato cercano y la rapidez del servicio te hacen sentir especial incluso en los días más concurridos. Su menú de 13 € es todo un acierto: platos bien presentados, ingredientes frescos y sabores que conquistan – desde la jugosa pluma aderezada a la perfección hasta las sabrosas vieiras y los secretos del bosque, un bocado irresistible de champiñones rebozados.



Disfruta de una terraza con encanto, aunque un poco inclinada, ideal para quienes valoran el aire libre. La experiencia se enriquece con el pan, esponjoso y adictivo, aunque no lo pidas. La coliflor podría ganar con un toque extra de sal y especias, pero en conjunto, la calidad y abundancia de las raciones, sumadas a una relación calidad-precio de escándalo, hacen que este lugar merezca repetir visita.

Visitar el Restaurante Charrúa en el corazón de A Coruña es embarcarse en un viaje de sabores irresistibles. A tan solo dos minutos del emblemático obelisco, este local argentino-uruguayo conquista desde la entrada, con una parrilla a la vista y una decoración moderna que invita a quedarse. La carne, simplemente espectacular, se deshace en la boca y demuestra el arte de la parrilla de verdad.



El ambiente vibrante y el trato atento del personal convierten cada visita en una experiencia acogedora e inolvidable. Si eres amante de la buena carne, Charrúa es una parada obligada: satisfacción garantizada, incluso siendo consciente de que el precio acompaña la calidad. Sin duda, repetiré cada vez que pase por A Coruña.

Descubre un rincón encantador en pleno casco antiguo de La Coruña, donde la hospitalidad se conjuga con una oferta gastronómica irresistible. El menú deslumbra con más de diez opciones de primeros y segundos, fusionando sabores tradicionales de la región con platos caseros exquisitamente preparados. El ambiente acogedor invita a quedarse, y el trato atento del personal añade ese plus que convierte cada visita en una experiencia memorable.



Tanto en semana como en fin de semana, la relación calidad, cantidad y precio es insuperable: menús generosos desde solo 15€, ideales para compartir entre amigos o en familia. La selección de vinos acompaña perfectamente y la profesionalidad del equipo deja huella. Volverás cada vez que pases por la ciudad, garantizado.

Un festival de sabores te espera en cada visita: los tacos de atún marinado con helado sorprenden con una explosión de texturas y matices frescos que cautivan desde el primer bocado. El ambiente acogedor y el equipo, tan atento como cordial, elevan la experiencia a un nivel memorable.



Aquí, cada detalle irradia calidad: la lubina, suculenta y perfectamente cocinada, y las alcachofas, delicadas y llenas de sabor, conquistan incluso a los paladares más exigentes. Sin duda, repetirás para deleitarte una y otra vez.

En pleno corazón de A Coruña se esconde un rincón donde el sabor argentino cobra vida. Atmósfera acogedora, carnes de excelencia y un servicio cercano te invitan a vivir una experiencia culinaria única, donde cada detalle se cuida con auténtica pasión.



No puedes irte sin probar el churrasco, una delicia jugosa que conquista al primer bocado. El broche de oro lo ponen los postres caseros, pensados para redondear la velada y dejarte con ganas de volver.

Descubre el auténtico sabor de Galicia en una taberna histórica en pleno corazón de A Coruña. Este rincón, con su atmósfera cálida y decoración típica gallega, invita a relajarse y disfrutar de la verdadera cocina tradicional. Aquí, cada plato es un homenaje a la comida casera: croquetas con bechamel etérea, calamares fritos crujientes y un codillo que conquista cualquier paladar.



El ambiente cercano y el trato profesional del servicio hacen que cada comida se convierta en una experiencia inolvidable. Ideal para quienes buscan calidad y precios justos, este restaurante es parada obligatoria; eso sí, no olvides reservar. Comer aquí es saborear Galicia en cada bocado.